El feriado por el bicentenario de la creación de la bandera estuvo signado por una intensa actividad en el sector mercantil, particularmente en la principal arteria comercial de la ciudad, la peatonal Junín. En la víspera del inicio del ciclo lectivo, fue más que importante el movimiento en las librerías y locales de los rubros indumentarias y zapaterías.
Casi todos los comercios de la Junín abrieron ayer sus puertas y la mayor cantidad de gente en los locales se registró en la tarde y tarde-noche, particularmente para la compra a último momento de útiles y calzados, aunque también de indumentarias para el colegio.
En dos de las principales cuadras de la peatonal, sólo cinco o seis comercios estaban cerrados, en especial sucursales de grandes cadenas de electrodomésticos y casa de telefonía móvil, entre otros. Las demás calles del centro estaban más tranquilas, aunque con varios comercios abiertos.
Una de las principales librerías de Junín estaba abarrotada de clientes sobre la tarde y el anochecer de ayer. También las zapaterías registraron una buena jornada, como las casas de productos deportivos y de indumentaria escolar.
Después de un fin de semana extra largo como lo fue el de mediados de mes, por los feriados de carnaval, como también por la proximidad de la vuelta al colegio que se concreta hoy, el comercio registró en los últimos días un intenso movimiento. Los más beneficiados: locales de ropa, calzados y útiles y accesorios escolares.
En efecto, desde el jueves se acentuó este buen panorama comercial, a partir del cobro de salarios de estatales provinciales. Incluso el sábado se registró mucha venta en las libreras y ya ese día se anunciaba que el lunes también abrirían sus puertas.
“La verdad es que esperábamos mucha gente pese al feriado, pero por momentos tuvimos que ordenar el ingreso de clientes por la cantidad que llegaron en la tarde”, admitió a El Litoral la encargada de una de las librerías que más trabajo ayer.
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